La desnutrición crónica es una de las principales causas de mortalidad infantil en el Perú, según datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). Revertir este problema no solo significa una población más saludable, sino las repercusiones en el crecimiento infantil.
Pese a que la desnutrición en el país ha sido durante más de 20 años la principal preocupación de políticas públicas y programas sociales, la concentración del presupuesto de los gobiernos regionales y locales en obras de infraestructura ha hecho que su presencia sea todavía elevada.
La estrategia de Solaris para combatir este mal se sostiene en la participación comunitaria y la concertación del presupuesto participativo. Esta deberá ser apoyada por la familia y liderada por los gobiernos locales para optimizar los resultados.
La implementación de estas propuestas se llevó a cabo en el distrito de Tisco (Arequipa) y los beneficiarios fueron menores de 3 años. La elección del lugar fue motivada por las alarmantes cifras: 41,5% desnutrición crónica y 71,3% de anemia en los niños dentro del rango de edad.
¿Qué se logró?
• Los mensajes sobre el cuidado y prevención de la anemia fueron reforzados y aplicados progresivamente con campañas itinerantes de salud
• Implementación del programa de capacitación al personal de salud. Este fortalecimiento tuvo por finalidad reforzar la atención prenatal
• El trabajo articulado entre el gobierno local, los servicios de salud y la comunidad